martes, 11 de marzo de 2014

Historias para no dormir

No veía nada.
Mis ojos estaban tapados por un pañuelo. Es suave.
Todo estaba oscuro.
Sentía como el sudor bajaba lentamente desde mi frente hasta mis pechos.
Sentía frío y a la vez calor.
A penas podía mantenerme cuerda.
Creo que me han drogado.
Tengo los brazos elevados.
Me han amarrado. Creo que son unas esposas, pero no me hacen daño.
No llevo ropa. Solo tengo mis calcetines y las bragas.
Supongo que...¿Gracias?
No se por qué, pero no siento a penas miedo.
Siento curiosidad.
Siento mi cuerpo estremecerse.
Es inquietantemente encantadora esta situación.
¿Cómo he llegado aquí?
No lo sé. No sé por que estoy aquí, pero dada mi situación me hago una idea. Una idea irresistiblemente tentadora.
Deseo que ocurra.
Deseo ser tocada.
Sé que hay alguien ahí, y se que no estoy casi desnuda para solo mirar mi cuerpo en este estado.
Me acarician.
Unos dedos recorren mi espalda suavemente.
Me encanta.
Mi vello se eriza. Mi respiración se agita.
Le siento por mi cintura. Lo siento cerca.
Le oigo respirar. Lo hace fuerte.
Su cuerpo está cerca. Es caliente.
Acaricia mi torso. Es demasiado.
Sube hacia mis pechos. Mi cuello.
Ha agarrado mi cuello. No me hace daño.
Vuelvo a sentir su aliento.
Besa mi cuello. Lo lame. Lo muerde.
Sus manos recorren mi cuerpo.
Estoy muy cachonda.
Vuelve a mi cintura. Hazlo. Mete tus manos en mis bragas. ¡Hazlo!
Lo hizo. Y lo hizo suavemente.
Primero fue lento. ¡Dios!
Abrí mis piernas. Quería que me lo hiciese. Pero no.
Simplemente siguió jugando conmigo.
Me encantaba.
Peeo quería más.
Acarició mi clítoris con un poco mas de presión. Házmelo ya hijo de puta.
Nadie me había hecho sentir así.
Estaba desesperada.
Noté su otra mano.
Esta vez la metió. Me metió sus dedos. Pero eso nonera placer.
Estaba en el jodido paraíso.
Los movió más rápido. Y gemí como una loca. Me corrí.
Sacó sus manos. Se apartó de mi espalda.
¿Dónde está? Quiero que siga.
Le siento de nuevo. Sus labios rozan los míos.
Me agarra. Ha levantado mis piernas. Le agarré la cintura.
Me acerca a él. Siento todo su cuerpo. Está empalmado.
Eso me pone más y más.
Nuestros labios siguen rozándose. Me lancé. Se apartó. Volvió de nuevo. Seguimos así mientras me acariciaba y arañaba la piel lenta y delicadamente. Me besó. Nos besamos alocadamente.
Nuestras lenguas se encontraron.
Y llegó el momento. Apartó mis piernas y me quitó las bragas.
Colocó de nuevo mis piernas en su cintura. Y me la metió.
Me la metió hasta el fondo. Era increíble.
Me agarraba el culo fuertemente con sus manos.
Me la estaba metiendo y sacando lentamente. Era desquiciante.
Pero grandioso. Nunca me había sentido así.
Pero sin darme cuenta aceleró el ritmo.
Le oí. Estaba disfrutando. Y yo también.
Pero no aguantaremos mucho más.
Su polla arde y mi coño también.
Estaba gritando. Y gritaba como nunca.
Y me lo dijo. "Córrete. Corrámonos juntos".
Y así fue.
Pude sentirle. Y él a mí. Le agarré más fuerte con mis piernas. Él agarró mi espalda.
No era normal lo que ocurrió. Pero fue impresionante.
No tenía nombre.
Nuestros cuerpos se fusionaron. Nos corrimos entre gritos.
Y lo demás fue silencio.
Poco después me soltó. Me quitó las esposas. No huí. Me agarró y me atrajo a él. Toqué su cuerpo con sus manos. Notaba aún su respiración algo agitada.
Volvió a rozar sus labios con los míos. Me besó. Le besé.
Agarró mi cara suavemente. Se acercó a mi oído. Gracias por este sueño preciosa. Eso me dijo.
Me empecé a sentir mareada. Me volvió a drogar. ¿Cuándo?
Me agarró más fuerte. Me desmayé.
Desperté en mi cama con sudores fríos.
¿Había sido un sueño?
Esperaba que no.
Me incorporé un poco. Era de día.
Y me sorprendí al ver que estaba en bragas y calcetines. Mi corazón se exaltó.
Tenía algo en las bragas. Una nota.
Había una nota en ellas.
La leí. "Nos vemos esta noche de nuevo preciosa".
Dejé caer mi cuerpo. Lo acaricié lentamente recordándolo todo.
Mi visión se dirigía al techo.
Cerré los ojos. Sonreí. Reí.
Nos veremos de nuevo.


Esto, señoras y señores, es un trabajo para clase, espero que os haya gustado, porque los de mi escuela han flipado jaja.
Dulces sueños.

No hay comentarios:

Publicar un comentario